En Fincas Padua sabemos que, en Barcelona, el desplazarse de un sitio a otro usando nuestro coche provoca que perdamos un tiempo valioso; dado que la ciudad condal cuenta con un número muy alto de vehículos y es muy habitual que se produzcan atascos en las horas puntas. Tal circunstancia está potenciando que cada vez sea más común ver a personas que se desplazan en bicicleta. Aunque esto plantea claros beneficios, tanto en lo relativo a la salud como al medio ambiente, es cierto que genera una pequeña controversia. Todos somos conscientes de que no podemos dejar nuestra bicicleta en la calle, dado que, probablemente, al día siguiente no la encontremos. Sin embargo, ahora que te planteas comprarte una, observas como tu piso de la Rambla de Poblenou, no cuenta con suficiente espacio para albergarla. No debes preocuparte, dado que vamos a plantearte algunas soluciones a esta situación.
Aunque no eres un amante de la bicicleta, te resulta muy practica en tu día a día. Temes que su uso pueda provocar alteraciones en tu hogar, dado que deberás acomodarlo a este nuevo objeto. Una buena opción para incluir este medio de transporte en nuestros hogares es colocando unos anclajes en la pared. Esta opción resulta ideal para utilizarla en la terraza o si tienes una estancia de grandes dimensiones. De este modo, tu bici se encuentra ubicada y solo tienes que quitar los ganchos para utilizarla.
En el caso de que vivas en un piso de alquiler y no puedas realizar agujeros en las paredes, lo mejor es optar por los colgadores de suelo. Estos son muy parecidos a los que puedes encontrar en la calle y la única contraprestación que ofrecen es que necesitas de espacio para poder colocarlos.
Por último, si eres de los afortunados que posee un trastero o un garaje en su edificio, no hay nada más que discutir. Este lugar es ideal para colocar tu bicicleta y que esta no te robe espacio de tu hogar. Puedes ubicarla con cualquiera de las dos opciones anteriores o utilizar unas poleas y estacionarla en altura.
